Se acabó
El triste quehacer de las variables remueve la raíz de las certezas
abunda sin decoro ni cobijo, se abraza del plomero y del poeta
rechina en el delirio de la noche…
hay anhelos que maduran la sevicia del que espera agazapado la derrota
un temblor y caos en el pecho, un parir de mierda en la mirada
y en la casa oscurecida, el pavor.
Un sabor en lo profundo
óxido de mares en cavernas
una estela de espuma
en la marea
un montón de pájaros sin patria
miles de árboles sin hojas
espejos y reflejos rompen las auroras
amores olvidados, canciones, viejos disfraces
todo brilla desnudo y cruel mientras llueve
Una calle adoquinada, faroles apagados
un muelle adonde nadie va pero que espera
enredaderas enamoradas en las ventanas
el perro a solas acostado sobre el suelo
brilla desnudo y cruel mientras llueve
Cada nube con su oscuro en pleno rayo
cada gota redonda y asesina
la lluvia desnuda
cruel
brillando.
Se acabó la fluida voz que la marea alcanza
terminó lo que se daba
se acabó lo que se piensa aunque no pienses
empezó otra vez la calle a pasar bajo el profundo azul
que calcina la tarde
Los pájaros bebieron de aquel mar, y se fueron.